Canon EOS C300: cine en formato DSLR

 El gran día ha llegado. Todos los aficionados a la fotografía esperaban como agua de mayo el día 3 de noviembre. Esa era la fecha elegida por Canon para presentar en Hollywood su último y esperado equipo. No, no es una cámara de espejo y sí, si es una DSLR, pero enfocada al mundo del cine. Nos referimos a la nueva Canon EOS C 300, una cámara de gama alta, diseñada fundamentalmente para competir en el segmento de grabación de vídeo a Full HD, donde Canon ya es conocida por sus buenos equipos.

Basada en un sensor CMOS de 8Mpx y tamaño similar a Super 35, cuenta con una resolución nativa de 2160×3840 píxeles, destacando especialmente en en la grabación de vídeo en Alta Definición, donde es capaz de alcanzar resoluciones de 1080p con framerates de 59,94i, 50i, 29,97p, 25p, 23,976p y los famosos 24p. Todo ello en formato de archivo MXF y utilizando un codec MPEG-2 con sampleado a 4:2:2 y btirates de 50 Mbps. Con un nivel de ISO que va desde los 320 hasta a 20.000, se comenta por la red que el modo “nativo” anda sobre los 800 ISO.

Como sistema de almacenamiento Canon ha optado por prácticas tarjetas Compact Flash (para las que cuenta con doble slot), que aunque prácticamente en desuso en el mundo del consumo, son ampliamente utilizadas en entornos profesionales. De hecho, los ingenieros de Canon han diseñado todo el equipo pensando en el mundo del cine, para lo que han optado por un diseño modular. Así se le pueden añadir grips, visores externos o agarraderas, de modo que a los técnicos se le abre todo un mundo de posibilidades de configuración del equipo.

Lo interesante del equipo, es que Canon ha querido construir todo un nuevo ecosistema alrededor de esta nueva videocámara, perdón réflex digital. Así, han presentado toda una nueva gama de ópticas especialmente diseñadas para funcionar en conjunción con ella.